20 mayo, 2006

La máquina del tiempo.

El otro día vi una película que no sabría como calificar, dejémoslo en “extraña”. Pues eso que vi una extraña película en la que trabajaba Jeremy Irons titulada La máquina del tiempo. Y a pesar de que en un principio me pareció una rallada, cuánto más pienso en algunas de las ideas que trataba más coherentes me parecen.

La película arranca con la muerte de la novia del prota, un científico obsesionado con su trabajo, que se vuelve medio loco cuando pierde el que él cree el amor de su vida. Entonces sale a la luz uno de los grandes tormentos del ser humano, su incapacidad de resignarse a los acontecimientos, y su enorme vanidad que le lleva a creer que sus actos podrían haber cambiado el curso del mundo y de la vida. La gran aflicción de todos los hombres con respecto al pasado, los remordimientos y la culpa, llevan al protagonista a construir una máquina del tiempo para viajar al pasado con el fin de evitar lo “inevitable”. Pero para su desgracia descubre que el libre albedrío sólo permite variar las circunstancias en las que se producen los acontecimientos fundamentales de nuestras vidas.

Tras ese terrible descubrimiento, nuestro guapo protagonista de peli americana, viaja al futuro en busca de respuestas y descubre que por muchos años que pasen la muerte seguirá siendo uno de los grandes “misterios” para la humanidad y también una de las verdades más difíciles de asumir sin oponer resistencia. Y también que el hombre es el lobo para el hombre, el causante, a veces consciente y otras inconsciente, de las grandes catástrofes naturales que destruyen millones de vidas y el mayor depredador de la especie humana.

Y como toda americanada, y a diferencia de la vida real, el final es un poco novela rosas ya que el prota encuentra un nuevo amor al que le salva la vida y con el que “come perdices”.

Me quedo con una frase del malo:

- “Todos tenemos nuestras máquinas del tiempo, las que nos llevan al pasado son los recuerdos, las que nos llevan al futuro son nuestros sueños”.

Por cierto en la peli también aparece un super-bibliotecario del futuro, un tipo “curiosón”. Jejeje
;-)